Traductor

viernes, 30 de agosto de 2013

PUEDO CAMBIAR

Cuántas veces hemos escuchado la frase "puedo cambiar" en medio de un rompimiento.


PUEDO CAMBIAR


"Puedo cambiar" generalmente es una frase manipuladora, implica que la persona agresora es perfectamente consciente de todos los males que ejerce en contra de su pareja y aún así lo sigue haciendo, a pesar de que sabe que su contraparte sufre.

La frase "puedo cambiar" (o similares como "te juro que cambiaré", "seré otro/a", "por ti yo sí cambiaría", etc.) surge generalmente cuando uno de los miembros de la pareja se da cuenta de que la otra parte lo manipula, chantajea, grita, controla, o presenta algún otro comportamiento agresivo que pudiera empeorar en el futuro, y entonces decide terminar la relación. Es entonces, ante la amenaza de perder a la pareja, que el miembro agresor hace hasta lo imposible para evitar el abandono: ruega y promete cambiar por el bien de la relación. Y es entonces, cuando la persona agredida puede conmoverse y decidir continuar con una segunda (que a veces se convierte en tercera o cuarta) oportunidad.

En estas situaciones, ese "puedo cambiar" es el equivalente al "lo siento" de un niño que se disculpa sólo para evitar el regaño de sus padres y no porque realmente entienda que está haciendo algo incorrecto.

Aquí la cosa es, cuando sabemos que algo anda mal con nosotros porque nos daña o daña a los demás, tratamos de cambiarlo: pedimos ayuda, vamos a terapia, solicitamos consejos. Todo esto para mejorar nuestra relación los demás.

Pero cuando una persona utiliza la frase "puedo cambiar" sólo para evitar una ruptura, no lo está haciendo porque realmente crea que hay algo mal en ella misma, sino porque espera que con eso el otro cambie de opinión. Dice eso para manipular la conducta de la pareja y no para expresar una verdadera intención de cambio.

Y las cosas quizá "cambien" durante un tiempo. Lo cierto es que no es un cambio real, se trata sólo de atenciones especiales y momentáneas en un intento de conservar a la pareja; pero una vez que pasa la crisis, el agresor vuelve a actuar como siempre lo hace, pues para él así es como se debe actuar.

Por eso es muy común escuchar de historias en donde alguien utiliza el "puedo cambiar" y durante unas semanas se convierte en el galante ejemplar: flores, regalos, cenas románticas, comidas especiales. Y al cabo de un tiempo vuelve a gritar o chantajear, y culpar a la pareja de sus propios desplantes.

¿Y qué pasa cuándo en medio de la discusión se decide no hacer caso a ese "puedo cambiar" y terminar la relación? Es ahí cuando realmente puedes ver las verdaderas intenciones de cambio, pues generalmente la reacción es de odio e ira, gritos, acusaciones, etc.

Moraleja: Si decides terminar una relación porque te sientes incómoda con la conducta de tu pareja, recuerda que la frase "puedo cambiar" no va a borrar automáticamente todo su historial de meses de abuso y, lo que es peor, le dará la oportunidad de incrementar sus maltratos.

0 comentarios :

Publicar un comentario