Traductor

miércoles, 24 de abril de 2019

El país que más mata muejeres es México

México es el país que más mata. Esa es la noticia que ha dado a conocer Amnistía Internacional en su más reciente informe.



México es el país que más mata a las mujeres
México es el país que mata mujeres


La organización culpa al Estado, pero no es de extrañarse. Nueve mujeres al día mueren todos los días; pero no las mata el estado mexicano, sino el machismo de sus ciudadanos.

Que México sea el país en donde más mujeres son asesinadas significa también que es uno de los países más machistas del mundo. Se refleja en la calles, los hogares y las escuelas. En las redes sociales no se hacen esperar los comentarios y publicaciones llenas de odio.

Por ejemplo:

Un joven, no mayor a 26 años, publica un post: una mujer diciéndole a un pretendiente que primero muerta a tener sexo con él, el hombre la mata y tiene sexo con el cadáver. El chico que lo publicó lo hizo porque “le pareció gracioso”.

Una mujer joven camina por las calles de la Ciudad de México cuando escucha una diminuta voz gritándole: ¡Mamacita que sabrosa estás! La voz no es de un “monstruo pervertido enfermo”, se trata de un NIÑO de tan sólo 9 años.

Una chica tiene un puesto ambulante frente a una iglesia, vende perfumes para mantener a sus hijos. A media mañana alguien se acerca para decirle “mejor debería quedarse en su casa a cuidar a sus hijos”, nuevamente no se trata de un hombre adulto blanco con privilegios, sino es un niño de 6 años; por cierto, hijo de una de las vendedoras ambulantes de los alrededores.

Una chica universitaria, 25 años, sufre porque su novio la humilla todos los días, porque se enoja y todo critica, y ella es la culpable y la que tiene que poner “la solución” a los problemas de pareja ¿y cuáles son dichos problemas? Pues hay una larga lista: que ella le hable a otros hombres, particulares si son amigos o compañeros de trabajo, que vista falda o vestido (aunque en su trabajo le exigen vestimenta formal), que quiera pasar más tiempo con su pequeño hijo de dos años o con su hermana mayor, que quiera ir de compras con su madre o sólo quedarse en casa a estudiar porque viene la temporada de exámenes. En cambio él, él no tiene la responsabilidad de nada, aunque le haya sido infiel, aunque coquetee con otras enfrente de ella, aunque se burle de sus gustos frente a sus amigas, aunque se ponga borracheras todos los fines de semana y se pelee en las calles para luego llamarla y ponerle una gritiza por teléfono.

Un médico profesional le es infiel a su esposa, se excusa diciendo que su pareja nunca está y se siente solo, que él quiere tener hijos y ella no. Mientras tanto, la amante tiene aguantar una relación donde el que no tiene tiempo es él, donde si quiere le contesta las llamadas y si no no. Una vez ella olvida su bolsa de maquillaje en el auto, un descuido, la esposa lo descubre. En el siguiente encuentro el médico culpa y le grita a su amante, acusándola de querer hacerle daño a él. Dos mujeres están sufriendo, pero el hombre siente que no tiene ninguna responsabilidad para con ninguna.

Y así la lista podría seguir.

Para muchos parecieran cosas menores, lo son hasta que se salen de control.

Muchos hombres caen en estas conductas, son así siempre con todas las mujeres con las que entablan una relación, y si algo sale mal siempre será la culpable ella. Por lo que si ellos pierden el control, siempre se justifican en alguna acción que ella realizó: no cocinaba, no me daba suficiente tiempo, me era infiel (aunque muchas veces estos delirios están en su cabeza).

Si el varón pierde el control, encontrará cientos de justificaciones para ello. Lo triste de esa falta de autocontrol es, que al estar justificada, no habrá nunca un límite. Así que una crisis puede empezar con algo pequeño e ir cada vez en aumento hasta terminar con la muerte.

Los hombres que cometen feminicidio no suelen llegar a ese punto de la nada, comienzan con pequeñas cosas. Al principio sienten remordimiento, saben que hicieron mal y algunos se llegarán a disculpar, los más machistas no lo harán nunca, aquellos que se disculpan de cualquier forma buscarán una justificación y eso hará que el incidente se repita cada vez con mayor intensidad.

Sí, el Estado es omiso; pero eso se debe a que quienes conforman la burocracia, incluyendo a las autoridades, son personas que han crecido bajo las alas del machismo y abuso hacia las mujeres; es lo que la sociedad ha creado.

Ve a cualquier foro donde haya una denuncia pública por violencia o abuso sexual, la mayoría de los comentarios la culparán a ella o dudarán de la veracidad de lo que dice. Si eso pasa en los niveles más elementales ¿cómo es que el Estado sentirá la presión de la sociedad y la opinión pública, cuando estos mismos respaldan tales opiniones?

Los feminicidios en México no se van a acabar; las mujeres seguirán muriendo, no sólo por un Estado omiso en sus deberes, sino porque como sociedad estamos alimentando y justificando la violencia y la opresión de la mitad de la población.

0 comentarios :

Publicar un comentario